Muni de Montes de Oca tardó un mes (o hasta 7) en responder 33% de quejas de vecinos

[vc_row][vc_column][vc_column_text css_animation=»fadeInRight»]Por Ernesto Núñez Chacón[/vc_column_text][vc_empty_space height=»25px»][vc_column_text] Hay cosas que tardan en Montes de Oca. Viajes tardan más desde que se inauguró el carril exclusivo de buses (tema de otro reportaje), el alcalde lleva 3 años sin cumplir su promesa de videovigilancia (tema de OTRO reportaje), y 1 de cada 3 vecinos que se quejaron con la Muni en los últimos 2 años esperaron un mes -o hasta siete-para recibir una respuesta.[/vc_column_text][vc_column_text]Entre 2017 y 2018, los monteoqueños presentaron casi 200 inconformidades a la Muni. Según la Ley, su Contraloría de Servicios es la encargada de recibirlas y “…deberán ser tramitadas con la mayor diligencia…”. No obstante, la Contraloría nunca se ha incluido en las evaluaciones que ha realizado el gobierno local sobre la percepción ciudadana con los servicios municipales.

Los Guachis de Montes de Oca solicitamos a la Muni el registro de inconformidades presentadas formalmente por los vecinos ante la Contraloría de Servicios durante los últimos 4 años, así como la fecha en la que se plantearon y en que la Muni le respondió al usuario. Sin embargo, según la alcaldía, solo hay registro de 2017 en adelante porque “no hay informes registrados de la administración anterior sobre las cantidad de gestiones trabajadas en la Contraloría de Servicios”.

De casi 200 inconformidades presentadas entre 2017 y 2018 ante la Contraloría de Servicios de la Muni. 68% fueron respondidas en menos de un mes. El resto esperó entre en un mes y hasta poco más de 7 meses y medio para recibir una respuesta. 

18% de las inconformidades de los vecinos esperaron entre un mes y casi 2 meses por una respuesta. 7% esperó entre 2 meses y casi 3 meses. 4% esperó entre un trimestre y casi 4 meses. 2% esperó entre un cuatrimestre y casi 5 meses. Esto último equivale a 4 inconformidades que siguieron esperando ser atendidas incluso después de que los estudiantes en las U privadas habían superado “fin de cuatri”.

Las 2 inconformidades que más tiempo esperaron por respuesta de la Muni fueron sobre el servicio de basura y sobre un trámite para cambios en un derecho de cementerio. La primera esperó más de 6 meses y la segunda más de 7 meses y medio. Ambas fueron en 2017. Según la Consulta Ciudadana Local del año pasado, 8% señaló la lentitud y desorganización de la Muni como una de las principales razones detrás de su valoración de ella. La nota que recibió la Muni en 2018 fue un 3.8 de 5. 37% de los vecinos encuestados se ubicaron en la categoría de “detractores” de la Muni.

El regidor Mario Ruiz afirma que ha criticado a la alcaldía porque no ha demostrado cómo utiliza los resultados de las encuestas de percepción de los servicios municipales para mejorarlos. “La tardanza que tiene en resolver la Contraloría de Servicios va muy ligado a eso”, señaló. “…Viene a reflejar que no es satisfactorio el tiempo en que se les resuelve los problemas a los usuarios, o se les atienda la solicitud de información, o cualquiera que sea el trámite que se hace ahí”

“Para mí es lamentable que eso no se haya resuelto en este período siendo que la administración ha venido haciendo alarde desde el 1ro de octubre de un compromiso de gobierno abierto”, acusó el regidor Ruiz, quien reconoce que incluso en ejercicio de su cargo ha topado con dificultades para obtener respuestas prontas a solicitudes de información que ha hecho a la administración.[/vc_column_text][vc_column_text]

Hace casi un mes se solicitó una entrevista con el alcalde para conocer sus explicaciones sobre este tema. La alcaldía dio audiencia a Los Guachis para este jueves 22 de agosto, pero un día antes decidió cancelar hasta nuevo aviso. 

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Una ley alcahueta y un Concejo Municipal que no reglamenta

[/vc_column_text][vc_column_text]La Ley Reguladora del Sistema de Contralorías de Servicios NO fija un plazo en el que la Muni debe responder a partir del momento en se plantea la queja. Solo establece un máximo de 5 días hábiles para que los órganos de la Muni respondan a las consultas de la Contraloría, y un máximo de 10 días hábiles para que con esa información ésta responda al usuario. Por ende, la Contraloría de Servicios de la Muni todavía estaría a derecho aunque esperase meses para pedir a los departamentos la información correspondiente e iniciar así el proceso de atención de la queja.

El regidor Ruiz precisó que si bien dicha ley no fija un plazo a partir del momento en que el usuario presenta su queja, sí existe un plazo de ley para el derecho de petición de información: 10 días hábiles. 

“Cuando yo pongo una queja, la Contraloría tiene que contestarle a la persona… tiene que mantenerla informada de los trámites que se están haciendo (con otros departamentos) porque si no pasa lo que refleja el análisis que ustedes hicieron… que dura un montón de meses y la persona ni sabe qué está pasando… urge mejorar eso…”, aseguró Ruiz.

Según la Ley Reguladora del Sistema de Contralorías de Servicios, la Muni puede reglamentar los plazos de la Contraloría para hacerlos más cortos inclusive, pero  “hasta el momento no se ha presentado ninguna iniciativa de reglamentar la Contraloría. Es un vacío que hay”, reconoció el regidor. Para él es difícil que un reglamento así salga antes del cambio de gobierno municipal debido a que la Comisión de Reglamentos tiene pendientes de hasta más de un año.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][vc_column_text]

¿De qué servicios se quejaron la mayoría de vecinos?

[/vc_column_text][vc_column_text]La mayoría de las quejas presentadas entre 2017 y 2018 fueron por el servicio de aseo de vías y sitios públicos  (parques incluídos) sobre el que se recibieron 17% de las quejas. A éste le sigue un empate en el segundo lugar entre control urbano, trámites y gestión vial. Cada una de estas áreas recibió 14% de las quejas contra la muni, lo cual equivale a 28 inconformidades por área. En tercer lugar se encuentra la recolección de basura.

Entre 2017 y 2018, a pesar de que dichos servicios recibieron el mayor número de los vecinos, la Muni perdió ingresos para reinvertir en la mejora de unos, y dejó sin ejecutar hasta 740 millones destinados al desarrollo de otros. Dese cuenta por qué en nuestra segunda entrega la próxima semana.[/vc_column_text][vc_empty_space height=»29px»][/vc_column][/vc_row]